Es evidente que el crecimiento económico y la intervención gubernamental no han reducido la pobreza y la exclusión presentes en el SUR Global. Por el contrario, estas se han exacerbado simultáneamente con el aumento poblacional; una demostración de ello se observa en la población de bajos ingresos que afronta limitaciones de acceso a sus mínimos vitales. Por estos y otros problemas persistentes, la ciudad y el territorio se constituyen en escenarios privilegiados para impulsar cambios que procuren resolver tales problemas, mediante el uso de diversas herramientas epistemológicas, teóricas y metodológicas.
En este marco es clave producir, circular y aplicar relecturas colectivas que comprendan la complejidad de la ciudad y el territorio, orientadas a: (i) mejorar las condiciones de vida de sus habitantes, con énfasis en las y los pobladores de los asentamientos auto-producidos; (ii) reinterpretar los procesos de expansión y consolidación urbano-rurales; (iii) compartir lineamientos alusivos al ordenamiento territorial de las “periferias”; (iv) reconfigurar instrumentos de planeación participativa con facultad para tomar decisiones que permitan habitar con justicia socio-territorial el SUR Global; (v) poner en discusión las alternativas al desarrollo configuradas por gobiernos nacionales y/o locales alternativos; y por último, (vi) repensar la relación de la ciudad y el territorio con otras formas de vida.
En este sentido, es ineludible comprender los retos y las perspectivas para habitar el SUR Global con el propósito de avanzar en las re-construcciones de la ciudad y el territorio que permitan materializar metas alternativas a las derivadas del modelo de desarrollo convencional. Por ejemplo, al entender la ciudad como un mega-proceso, dado en un tiempo y en un espacio determinados por unos actores específicos, es recusable que en su producción persistan prácticas de acumulación, explotación y expoliación de pocos con iniquidad social, precariedad físico-espacial, crisis ambiental, miseria económica, exclusión política, irregularidad jurídica, e invisibilización cultural para muchos de sus habitantes. En parte, ello niega el concepto histórico de ciudad señalado por Lewis Munford.
En concreto, nos concierne debatir ¿Cómo, en el marco de la ciudad y el territorio del SUR Global, es o no es posible habitar con justicia socio-territorial? ¿Cuáles son los retos que implican sus construcciones para las y los actores involucrados? ¿Qué perspectivas se podrían dinamizar al respecto?
Si bien es cierto que, actualmente, la ciudad es una manifestación global del modelo de desarrollo como neo-modernización, también es cierto que se torna inadmisible para la vida humana y no humana. Por ello, invitamos a compartir aspectos esenciales sobre formas alternativas de concebir y hacer ciudad, así como de construir territorios con metas colectivas que reconozcan los derechos de sus habitantes.
Como escenario a alcanzar, requerimos ciudades y territorios a escala humana integrados de mejor manera al medio natural, no sólo por su tamaño, sino por sus modos de habitar. De hecho, ciudades protectoras de una vida urbano-rural, justa en todas sus dimensiones. Hoy, estos ideales son desdibujados por realidades con altos índices de pobreza y porcentajes mínimos de redistribución de riqueza. Ciertamente, perdura un orden cuestionable que no sólo contraviene la utopía, sino que dificulta, cada vez más, a múltiples grupos sociales y naturales, disponer de ciudades y territorios con atributos democráticos.
Ahora bien, pensar en los retos y en las perspectivas del SUR Global para habitar con justicia socio-territorial conlleva análisis sobre los vínculos entre informalidad y formalidad, en los cuales (i) se valoren las capacidades de crear decires, saberes, teneres y aconteceres de sus intervinientes; (ii) se gesten nuevas alternativas de apoyo financiero estatal, de producción colectiva, de organización participativa y de corresponsabilidad social; (iii) se impulsen interpretaciones sobre sus articulaciones con re-construcciones de propósitos compartidos, tanto de ciudad como de territorio. En síntesis, implica reflexionar sobre ¿cómo poner en valor las alternativas al desarrollo en la ciudad y en el territorio?
Ahora bien, pensar en los retos y en las perspectivas del SUR Global para habitar con justicia socio-territorial conlleva análisis sobre los vínculos entre informalidad y formalidad, en los cuales (i) se valoren las capacidades de crear decires, saberes, teneres y aconteceres de sus intervinientes; (ii) se gesten nuevas alternativas de apoyo financiero estatal, de producción colectiva, de organización participativa y de corresponsabilidad social; (iii) se impulsen interpretaciones sobre sus articulaciones con re-construcciones de propósitos compartidos, tanto de ciudad como de territorio. En síntesis, implica reflexionar sobre ¿cómo poner en valor las alternativas al desarrollo en la ciudad y en el territorio?
Puestas así las cosas, y considerando las experiencias acumuladas durante los tres Seminarios Internacionales sobre Procesos Urbanos Informales realizados en 2007, 2012 y 2015, el Grupo de Investigación Procesos Urbanos en Hábitat, Vivienda e Informalidad de la Universidad Nacional de Colombia tiene el gusto de invitarles al IV Seminario Internacional Procesos Urbanos Informales: Habitar el SUR global con Justicia Socio-territorial.